La Chica Del Perro Songtext
Llevaba el vestido más triste de todo Madrid
Guardaba en el bolso un pedazo de mar y un delfín
Le dije al oído la noche en que nos conocimos:
"Que nos casa el DJ ahora mismo si dices que sí"
Y se iluminaron los satélites de golpe
Y todos los humanos nos echamos a reír
Y la diosa fortuna bailó para mí.
Cariño será una excepción si te invito a dormir
Mi perro es celoso, no sabe compartir
Guardaba en el bolso un pedazo de mar y un delfín
Le dije al oído la noche en que nos conocimos:
"Que nos casa el DJ ahora mismo si dices que sí"
Y se iluminaron los satélites de golpe
Y todos los humanos nos echamos a reír
Y la diosa fortuna bailó para mí.
Cariño será una excepción si te invito a dormir
Mi perro es celoso, no sabe compartir
Qué duerma en mitad de la cama, por mí no hay problema
Es buen tema para una canción si acabamos así.
Y los tres roncamos a la luz de las sirenas
Y al ruido de borrachos que pasaban por aquí
Y la diosa fortuna durmió junto a mí.
Después de unos meses me dijo te mudas aquí
Llevé dos guitarras, cien libros y algún calcetín.
Pasaron tres años volando entre risas y vino
Y el azar o el destino pusieron las letras del fin
Y nos despedimos con dos besos en la cara
Igual que dos extraños que no saben qué decir
Y el perro que olió la tristeza se puso a gemir
Volví a mis conciertos, mis bares con su cicatriz
Las medias naranjas se agotan de tanto exprimir
Mil noches pensé debería llamarla de nuevo
Pero el miedo es la excusa perfecta para malvivir
Y justo anteayer junto al florido del retiro Escuché un ladrillo que arañó mi corazón
Lo que vino después lo escribí y lo guardé en un cajón
Tal vez algún día la lo cuentes (X2)
En otra ocasión.
(Gracias a Fabiola Zamorano por esta letra)
Es buen tema para una canción si acabamos así.
Y los tres roncamos a la luz de las sirenas
Y al ruido de borrachos que pasaban por aquí
Y la diosa fortuna durmió junto a mí.
Después de unos meses me dijo te mudas aquí
Llevé dos guitarras, cien libros y algún calcetín.
Pasaron tres años volando entre risas y vino
Y el azar o el destino pusieron las letras del fin
Y nos despedimos con dos besos en la cara
Igual que dos extraños que no saben qué decir
Y el perro que olió la tristeza se puso a gemir
Volví a mis conciertos, mis bares con su cicatriz
Las medias naranjas se agotan de tanto exprimir
Mil noches pensé debería llamarla de nuevo
Pero el miedo es la excusa perfecta para malvivir
Y justo anteayer junto al florido del retiro Escuché un ladrillo que arañó mi corazón
Lo que vino después lo escribí y lo guardé en un cajón
Tal vez algún día la lo cuentes (X2)
En otra ocasión.
(Gracias a Fabiola Zamorano por esta letra)
