Chaqueño Palavecino

La Serenateña
En el Valle Calchaquí tomá un vino y alégrate entonces podrás decir que el cielo está en Cafayate. La luna sale a buscar el duende del remolino y el sol en el medanal enciende la luz del vino. Acaso por ser mujer me embruja la serenata y vuelvo por un querer que me ata y que me desata guitarra, estrella, ilusión de un querer se encanta mi corazón. Morena al oscurecer y rubia sobre la arena mientras haya una mujer en Cafayate no hay pena. A veces salgo a cantar con el resto que me queda y me vuelve a cobijar el poncho de la alameda. Aus Songtexte Mania